Oh! El reparto equitativo de la riqueza, todos hemos oído estas bellas palabras, pero envenedadas, alguna vez. En teoría el Estado cocnetra ciertos poderes que delegamos los ciudadanos porque la organización de otra forma sería caótica y anárquica. Eso está bien, las leyes y el orden son necesarios para que nuestros derechos no sean vulnerados y para que no vulneremos los de otros. Vale llegados aquí es normal que pagemos ciertos impuestos para mantener y crear infraestructuras, para mantener el sistema social-sanitario, un policía que nos sirva y proteja, carreteras, et cétera. El problema es que también tenemos que pagar unos impuestos so pena de cárcel incluso para ayudar a los necesitatados con un reparto equitativo de beneficios. En otras palabras tienen derecho a quitarnos todo lo que quieran y dar todo lo que quieran; tienen derecho a ROBAR.
¿Ahora decidme cuándo delegamos tal poder al gobierno? Porque si te niegas a pagar (cosa de la que puedes estar en tu derecho pues ha sido ganado con tu esfuerzo) no es que seas tachado de egoísta, es que te arriesgas a entrar en la cárcel. Si es una obra de caridad ¿Por qué esta extorsión?
Además con esto lo único que conseguimos es perjudicar a un grupo que ha trabajado duramente para favorecer a otro grupo que no es más que un grupo de parásitos que SÓLO y ÚNICAMENTE están aquí para aprovecharse de los beneficios de otros, y sumarlos a los que consiguen ellos mediante otros métodos fraudulentos.
En conclusión el colectivismo se encarga de instituir leyes y leyes para dar o quitarnos derechos. Por el otro lado tenemos el individualismo que se encarga de proteger los derecehos que ya tenemos por el puro hecho de nacer. Esos derechos que empezaron a tomar forma en el siglo XVIII.
El gobierno de hoy no hace más que imponer más y más leyes, violando nuestra privacidad, nuestros derechos y censurando la verdad. A esto se le llama colectivismo, y no se diferencia en nada con los antiguos totalitarismo que creímos eliminar el siglo pasado.
Parecen palabras fuertes, pero aquí está lo que no incluyen en nuestra educación. Ya llevan tiempo haciendo uso de los hombres en las colonias, engañándoles con falsas promesas y mentiras, y ya desde hace tiempo controlan nuestra vida y nos pisotean como quieren.
Pues sí que son palabras fuertes las tuyas.
ResponderEliminarDesde mi punto de vista en este momento nos debemos centrar en el debido y correcto reparto de nuestros impuestos. Sanidad, educación y progreso primordiales. Si nos quedamos un par de años sin ver ediciones de los Goya pues a aguantarse. Pero ya habrá tiempo para el espectáculo, ahora todos rememos al mismo sitio.
Yo sinceramente me pongo bastante enrabietado cuando salen nuestros candidatos a presidente de España diciendo: "me siento motivado", "les deseo lo mejor tras las elecciones", "ganar sería una recompensa a nuestro esfuerzo". Parece que nuestros políticos no se enteran que no se están jugando la Champions, se están jugando el futuro de un país, y aquí no es un grupo, sino el conjunto. Y después saldrá el grupo ganador: "Qué bote!, Qué bote!, Qué bote el presidente!"
El único bote que se va a llevar el presidente va a ser el de vuestros impuestos, motivaos!
Mr. Nobody
Se supone que ahí he puesto que estoy a favor de los impuestos por sanidad, educación y otros progresos, pero estoy en contra de ese reparto que realmente se convierte en dificultar la vida a unos para facilitar las cosas a otros.
ResponderEliminarPues eso, exactamente lo mismo que opino yo.
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